Recursos hídricos de Mendoza en su contexto regional

Laguna del Llancanelo: valores hidrológicos, sociales y culturales

Valores hidrológicos: 

  • Control de la erosión: la Laguna se encuentra ubicada sobre un gran salar que es contenido y protegido de la erosión gracias a la masa de agua que lo recubre. Cuando el espejo disminuye su extensión el salar queda al descubierto. Los vientos, que en ciertas épocas del año pueden llegar a los 150 km/h, actúan sobre él, relevan el material y lo depositan en áreas circundantes. Esto provoca la salinización de suelos productivos aledaños.

  • Captura de sedimentos: por su característica endorreica, la Laguna juega un papel muy importante como cuenca de captación de sedimentos lacustres, palustres y de material aluvional.

  • Aportes al pastoreo: Llancanelo representa una importante región de pastoreo natural, ya que al encontrarse enclavada en una zona de extrema aridez adquiere mayor importancia.

  • Educación, turismo y recreación: la Laguna y sus ambientes representan una verdadera atracción turístico-educativa. Esta   ofrece paisajes y elementos naturales tanto florísticos como faunístico distintos y únicos en zonas desérticas.

  • Dotación de hábitat para la vida silvestre: a la fecha se han resgistrado más de 160 especies, la mitad de las cuales son acuáticas. Muchas de ellas crían en la reserva (como el flamenco, los patos y las garzas, entre otros) y de estas últimas, 24 especies nidifican regularmente en Llancanelo. Estos datos demuestran el valor de la Laguna como refugio para la nidificación, reabastecimiento, invernada y reposo para las especies migrantes.

Valores sociales: pastoreo, educación, turismo, recreación e investigación. El Sitio brinda una amplia gama de posibilidades para el trabajo de investigación científica, no sólo en el campo de las ciencias naturales, sino también en otros de igual relevancia (Antropología, Geología, Volcanología, Biología, Edafología).

Valores culturales: la tradición folclórica en esta zona es de real importancia. Tiene elementos particulares que van desde la vestimenta personal, la indumentaria ecuestre y las prácticas ganaderas, hasta las artesanías, comidas y su tradición musical. Todos estos valores son propios y deben ser rescatados y preservados como patrimonio cultural de la provincia.